RETOMANDO TU VISIÓN DE SERVIR, AMAR, GLORIFICAR A DIOS

RETOMANDO TU VISIÓN DE SERVIR, AMAR, GLORIFICAR A DIOS.

Desde el comienzo de los tiempos creo Dios  a  Adán primer  hombre  en la tierra, con un modelo de vida y con las características de un adorador y con las cualidades de buen líder, fiel, disponible, y enseñado, que el carácter de Dios se manifieste en su existencia, ahora la razón por la cual Dios lo creo para su servicio vea Génesis 2:15 Tomó, pues, Jehová Dios al hombre, y lo puso en el huerto de Edén, para que lo LABRARA y lo guardase;  Adán se le dio el primer privilegio de LABRAR  la tierra y viviría en armonía con Dios, pero duró muy poco tiempo fue obstruido por la desobediencia a Dios,  y esta misma visión de servir a   Dios lo acredita a tu cuenta, vea Hebreos 6:10 y 12. Porque Dios no es injusto para olvidar vuestra obra y el trabajo de amor que habéis mostrado hacia su nombre, habiendo servido a los santos y sirviéndoles aun. Pero deseamos que cada uno de vosotros muestre la misma solicitud hasta el fin,  para plena certeza de la esperanza. A fin que no os hagáis perezosos, sino imitadores de aquellos que por la fe y la paciencia heredan las promesas. Segundo privilegio concedido a Adán es el AMAR, vea Deuteronomio 6: 5 Y AMARAS  a Jehová tu Dios de TODO TU CORAZON, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas; Que privilegio de Adán de ser el primogénito de la raza humana y padre de la familia de Dios, y el secreto  del éxito del amor nace en el hogar porque Dios dice que el amor es guardar sus mandamientos,  pero desde el momento que Adán desobedeció a Dios doblando sus rodillas ante satanás; el amor queda sin desarrollarse, y para que este se  active, es tu primer paso a la obediencia a la palabras de Dios, para que ames, y seas amado. 1ra. Juan 4:8 dice: El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor. El tercer  privilegio que Dios le dio a Adán es GLORIFICAR. Vea el libro de Isaías 43: 7 Todos los llamados de mi nombre; para GLORIA mía los he creado, los formé y los hice.

Adán fue instruido para alabanza de nuestro gran Dios, a gozar de su bondad, clamando al Rey de Reyes y Señor de Señores; pero esta exaltación divina para ti quedó escondido por un tiempo a causa de la desobediencia de Adán; Ahora ya eres libre para alabarle porque Jesucristo ya hizo todo por tu salvación, y con toda confianza has RETOMADO TU VISION DE SERVIR, AMAR, Y GLORIFICAR A TU BUEN DIOS. Recuerde que ser diligente produce resultados de bienestar y prosperidad. Que Dios te bendiga y tu familia. Amén.